Recibir un regalo es siempre agradable y divertido. Lo que nunca sabemos es los desafíos que ese ser querido tuvo que enfrentar para poder comprarlo. En Navidad, además del espíritu festivo, llega al ambiente el estrés de las compras.
Las largas filas y las multitudes que invaden los centros comerciales con parte ya de la tradición navideña. Encontrar ese regalo perfecto a veces se torna en un desesperante problema.
Entramos ya en el mes clave para las tiendas, aquel en el que tanto las Grandes Superficies como las tiendas especializadas se frotan las manos pensando en las ganancias que les pueden dar estas fechas tan señaladas. Y por supuesto nosotros, los consumidores, somos por regla general los primeros en caer en los gasto, a veces incluso sin demasiado control.
Sin duda las cifras son claras. Hay un nivel de subida claro en ventas en los meses de noviembre y diciembre. Por otra parte, las colas de espera en las tiendas son enormes y agotadoras las cuales no se ven durante el